Evangelio según San Lucas 19,41-44.
Cuando estuvo cerca y vio la ciudad, se puso a llorar por ella, diciendo: "¡Si tú también hubieras comprendido en este día el mensaje de paz! Pero ahora está oculto a tus ojos. Vendrán días desastrosos para ti, en que tus enemigos te cercarán con empalizadas, te sitiarán y te atacarán por todas partes. Te arrasarán junto con tus hijos, que están dentro de ti, y no dejarán en ti piedra sobre piedra, porque no has sabido reconocer el tiempo en que fuiste visitada por Dios".
COMENTARIO
Reconocer cuándo hemos sido visitados por Dios. Ese es el motivo del llanto de Jesús, porque no reconocieron en él a Dios, porque no reconocieron que eran visitados por Dios. Y la consecuencia de esa falta de reconocimiento es la destrucción, la muerte.
Te invito a tener una mirada atenta a tu vida, a lo que hoy te suceda y que descubras cómo Dios está ahí presente. Que no te pase inadvertida su visita, que lo estés esperando...Él podrá aparecer en las palabras de alguien cercano, en unas palabras que leas en el periódico, en esa música que hoy escucharás por la tarde, en ese rostro de ese nió o ese anciano con el que te toparás por la noche...
Y al final del día, dale gracias a Dios por haberte visitado, y renueva ese compromiso de buscarle al día siguiente, dile "Muéstrame tu rostro, Señor", y entonces, la paz, la bendición y su Misericordia llegará a ti y a los tuyos.
DWV
No hay comentarios:
Publicar un comentario